El día que llegó, lo hizo como un desconocido. En su primer partido lo abuchearon y de inmediato la afición pedía su salida. Llegó de 37 años como un desconocido a México. Parecía otra apuesta perdida del Cruz Azul. Martín Anselmi cambió todo eso muy rápido. Logró darle al Cruz Azul una cara temible. Convirtió a la máquina en eso, justo en eso. Rompió todo tipo de récords. Llegó a una final.
Todo era color de rosa. Martín Anselmi creo un equipo de ensueño, que pintaba para ser de época. Jugadores como Carlos Rotondi, Ignacio Rivero, Gonzalo Piovi, Kevin Mier, Willer Ditta, entre otros, formaron una escuadra que era difícil de vencer.
En su primer torneo, el Clausura 2024, Anselmi llevó al Cruz Azul a disputar la final. El rival: el América, el eterno dolor de cabeza. En su camino a disputar el título, Anselmi prometió cerrar filas y tener un romance eterno con la nación celeste.
Esa final la perdió. En un par de partidos muy cerrados y con controversia en la final de vuelta en el Estadio Azteca, Cruz Azul perdió una vez más contra su odiado rival. Fue un golpe fuerte que parecía imposible de remediar.
No fue así. Cruz Azul regresó más fuerte.
Llegó a la cantidad histórica de 42 puntos en la temporada regular. Un récord para torneos cortos. Parecía inevitable que la Máquina se alzara con su décimo título de liga. En los cuartos de final sufrieron un durísimo revés perdiendo 3 a 0 contra Xolos en Tijuana. Pero el Cruz Azul de Martín Anselmi está hecho diferente. En la vuelta, en la Ciudad de México, le dieron la vuelta a las circunstancias apabullando a su rival y avanzaron a semifinales.
Otra vez la misma historia, el América. En una serie para los libros de historia, América eliminó a los celestes. El partidazo de vuelta dejó un sin fin de situaciones que Anselmi y sus pupilos fueron incapaces de superar.
El golpe fue definitivo. El amor se acabó.
EL 2025 inició lleno de promesas. Anselmi prácticamente juró tener un amor eterno con Cruz Azul.
22 días después, eso cambió. Tras un arranque turbulento y un equipo que se ve afectado por los golpes americanistas, llegó una noticia. El amor eterno resultó no serlo. Anselmi se va.
El entrenador argentino tiene sus maletas hechas para irse al futbol de Portugal. Se acabó el romance y Cruz Azul tendrá que ver qué hace tras el abandono de quien le juró amor por siempre.
Parece que Cruz Azul necesitará un psicólogo y una sesión con "La Jefa", Adela Micha.