
Esta decisión se da luego de que las autoridades determinaran que los delitos por los que es perseguido en México no han prescrito.
La Fiscalía General de la República investiga al dueño de Altos Hornos de México por cuatro transferencias de 3.4 millones de dólares realizadas entre junio y noviembre de 2012 a Tochos Holding, una sociedad donde presuntamente Lozoya recibía sobornos.
Con este dinero, Lozoya habría comprado una casa en Lomas de Bezares y en diciembre del 2012 ya como director de Pemex solicitó la adquisición de la planta de Agronitrogenados de Fertinal, propiedad de Altos Hornos, planta que se adquirió en 275 millones de dólares, cuando estaba valuada en no más de 58 millones de dólares.
Alonso Ancira es señalado por los delitos de lavado de dinero y cohecho.