Uno de los legados del presidente López Obrador es una siniestra burla repetida 112 mil veces… Porque en la Comisión Nacional de Búsqueda su Gobierno nombró a una nueva titular… Y lo hizo pisoteando la Ley, pasando por encima de la dignidad de las madres y familias buscadoras… Humillando a cada una de las 112 mil personas que están desaparecidas en este país… La apuesta presidencial camina hacia un solo lugar… Manipular las cifras de personas no localizadas… En agosto pasado, Karla Quintana Osuna fue obligada a renunciar a la Comisión Nacional de Búsqueda… El motivo no lo externó ella, sino el Presidente un día después de su salida, pero desde hacía meses tenía una relación muy tensa con el ex subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas… Y también había dejado clara su inconformidad con el uso de las bases de datos estatales y federales para ajustar las cifras de personas desaparecidas… Además, Karla Quintana había hecho patente su rechazo a que servidores de la nación fueran casa por casa a corroborar el estatus de las víctimas, sin una debida metodología dirigida por las comisiones locales de búsqueda… Aquello era una falta de respeto, una muestra cruel de insensibilidad para las familias… Sólo imaginen la escena de ser una madre buscadora y que de pronto llegue alguien a preguntar si su hijo, su hermano, su esposo, sigue desaparecido… Una completa bajeza… Un retrato de la falta de sensibilidad de este Gobierno… Karla Quintana Osuna se fue dejando tras de sí una labor muy respetable, porque hacía algo que a este Gobierno tanto le incomoda… Iba a los estados gobernados por la oposición para tejer alianzas en pro de la búsqueda de miles de desaparecidos… Su visión, no era de túnel ni a contentillo del poder… Pero la 4-T ha dado muchas muestras de que la sumisión a quien vive en Palacio Nacional es lo que más pesa… Karla Quintana se marchó forzada… Y de hecho Alejandro Encinas también renunció, pero por ir a hacer campaña con Claudia Sheinbaum… Esa es la altura de los políticos que juran no ser como los de antes…