El crimen organizado en México se ha reforzado para combatir a sus enemigos y ganar territorio. La pelea de las plazas se ha vuelto cada vez más violenta y con nuevas tácticas. Según el periodista Ioan Grillo, los cárteles mexicanos están contratando a exguerrilleros o personal extranjero. Los reclutados estarían llegando de Colombia, Guatemala y Estados Unidos.
Prueba de ello fue lo que sucedió en Michoacán donde el pasado 28 de mayo se reportó la explosión de una mina, que dejó ocho militares mexicanos muertos. Tras las investigaciones el gobierno mexicano pudo detener a varios implicados, de los cuales más de 10 eran extranjeros.
En entrevista con Milenio, ALFREDO MOLANO, Cónsul general de Colombia en la Ciudad de México, confirmó que el gobierno de su país detectó la participación de al menos un integrante activo de las fuerzas armadas de Colombia en el reclutamiento de ex militares. La finalidad es que aquellos que estén interesados trabajen en México como pistoleros del crimen organizado.
De acuerdo con el medio, que tuvo acceso al diplomático, los veteranos colombianos son seleccionados con la promesa de sueldos de dos mil 500 a 10 mil dólares mensuales.
