
A plena luz del día y en menos de un minuto tres delincuentes lograron robar más medio millón de pesos en joyas en el corazón del Centro Histórico de Puebla Capital. Se trata del peor atraco registrado en lo que va del año en esta entidad.
Minutos antes de las dos de la tarde del siete de junio, tres sujetos armados irrumpieron en el Centro Joyero de la Plaza de la Mujer, ubicada sobre la calle 5 de Mayo, entre la 10 y la 12 Poniente, generando momentos de pánico entre turistas, locatarios, empleados y clientes que se encontraban al interior del negocio.
El atraco quedó registrado por las cámaras de videovigilancia evidenciando el modus operandi de los criminales. Vestidos de colores obscuros, con gorras, cubrebocas y mochilas, ingresaron por la entrada principal fingiendo ser clientes. Caminaron varios metros hacia el interior para, en un momento de descuido, sacar de entre la ropa armas de fuego similares a las metralletas Mini Uzi para amenazar a los presentes y llevarse la mayor cantidad posible de joyas.
En un primer video, se observa el momento en que, al percatarse del asalto, dos mujeres jóvenes detrás de un mostrador se agachan e intentan esconderse, sin embargo, uno de los ladrones se trepa en la vitrina para forzar la puerta desde adentro. Temiendo por su vida, una de las empleadas termina por facilitar el robo.
A la par de este saqueo, otra grabación muestra el momento en que sus dos cómplices se dirigen a otros locales, al tiempo que sacaban mazos para reventar y destruir las vitrinas que resguardaban en su mayoría, piezas de oro y plata.
Tras consumar el saqueo, los tres sujetos huyeron a pie por la calle 5 de Mayo, camuflándose entre los transeúntes y aunque la policía no tardo más que unos minutos en llegar, los esfuerzos de las autoridades no fueron suficientes pues los ladrones escaparon.
Aunque no hubo víctimas qué lamentar, excepto algunas personas que presentaron crisis nerviosas, el nivel de violencia y el uso de armas largas o subfusiles de asalto, han despertado una fuerte preocupación entre locatarios y residentes del centro histórico poblano.