
En menos de 15 días, dos funcionarios públicos del municipio de Teocaltiche, en Jalisco, fueron asesinados por presuntos miembros del crimen organizado, pues, según medios locales, trascendió que trabajaban para grupos rivales. Actualmente, la zona es disputada por miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación y del Cártel de Sinaloa, lo que deja expuesta una profunda crisis de inseguridad.
El asesinato más reciente fue el de José Luis Pereida Robles, secretario general del Ayuntamiento y dirigente del PRI a nivel municipal.
De acuerdo con la Fiscalía de Jalisco, eran las 4:57 de la tarde cuando el funcionario se encontraba comiendo en un restaurante de mariscos llamado “El Ranger”, ubicado en la calle Moctezuma Sur, en la colonia Centro de Teocaltiche. Ahí fue alcanzado por dos hombres armados que llegaron a bordo de una motocicleta. Uno de ellos descendió del vehículo y abrió fuego a quemarropa contra Pereida Robles, para después huir junto con su cómplice.
Fuentes ministeriales revelaron que la víctima se encontraba acompañada del regidor del municipio, Óscar Vital, quien afortunadamente resultó ileso. Durante los trabajos periciales, se aseguraron cinco cartuchos percutidos calibre 9 milímetros.
El asesinato ocurrió apenas tres días antes de que el secretario de Seguridad Pública del Estado, Juan Pablo Hernández, destacara el trabajo que la dependencia ha realizado en Teocaltiche y Villa Hidalgo.
Otro hecho violento reciente fue el asesinato de Ramón Grande Moncada, comisario de Seguridad Pública Municipal, quien fue atacado a balazos mientras circulaba en su vehículo particular. El elemento, de 53 años, viajaba acompañado de su esposa cuando, justo en el cruce de las calles Niños Héroes y Del Panteón, en la colonia San Martín, fue interceptado y acribillado.
Ambos homicidios se dan en el contexto del aseguramiento de un rancho en Teuchitlán, utilizado como bodega por el crimen organizado que opera en la zona y que se encuentra en guerra por la disputa de la plaza.