
En medio de la creciente violencia que sacude a Los Altos de Jalisco, fuerzas estatales aseguraron un rancho en el municipio de Teocaltiche, señalado como presunto refugio de células criminales. El operativo se realizó el 24 de abril, luego de un enfrentamiento a tiros entre agentes de la Fuerza Interinstitucional Regional (FIR) y civiles armados en la carretera Villa Hidalgo-Teocaltiche.
La persecución terminó en una propiedad conocida como "Las Margaritas", donde los agresores buscaron resguardarse antes de darse a la fuga. Dentro del rancho, ubicado en la comunidad de Santa María, las autoridades encontraron indicios claros de operaciones ilícitas: muros de más de tres metros, cercas electrificadas, cámaras de videovigilancia, una alberca y un corral donde mantenían aves exóticas.
Durante la inspección fueron aseguradas dos armas largas, además de una bodega que almacenaba múltiples cajas con autopartes, presuntamente robadas. En un despliegue paralelo, en el municipio de Villa Hidalgo, se localizó también una finca adaptada como centro clandestino de videovigilancia, equipada con pantallas de monitoreo y un arma de fuego adicional.
Hasta el momento no se han reportado detenidos vinculados a estos hallazgos. Sin embargo, las autoridades mantienen bajo resguardo las propiedades mientras tramitan las órdenes judiciales para catearlas de manera formal. De manera preliminar, se presume que estas instalaciones podrían estar relacionadas con células del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), aunque las investigaciones aún están en curso.
Teocaltiche, como otras zonas de Los Altos, atraviesa una fase crítica de inseguridad, marcada por desapariciones de activistas, ataques a policías y enfrentamientos armados. El aseguramiento de este rancho se suma a operativos recientes en Jalisco, como el del rancho Izaguirre en Teuchitlán, donde autoridades encontraron un centro de entrenamiento y tortura atribuido al mismo grupo criminal.