Desde el 14 de enero del 2020, cuando Ernesto Valverde dejó de dirigir al Barcelona, la relación entre Leo Messi y el equipo comenzaba a fracturarse.

El famoso Barçagate, el problema con Quique Setién, la difícil relación con Ronald Koeman desde su llegada, el documento enviado a Burofax para pedir su salida el 20 de agosto del año 2020 para después no presentarse a los entrenamientos, la decisión para quedarse hasta el 30 de junio del 2021 para evitar un juicio en septiembre, son solo algunos de los problemas que tuvo Messi en el último año y medio con la Institución.

En mayo de este año Messi comenzó sus vacaciones en la incertidumbre de si seguiría o no con el club en el que debutó hace casi 17 años. Aunque su padre tenía conversaciones con Joan Laporta, presidente del Club Barcelona, para definir el futuro del astro argentino, no tenía nada seguro mientras jugaba la Copa América.

El entrenador Koeman pedía que Messi se quedara debido a su "importancia". 

El 1 de julio se esperaba tener noticias sobre la renovación de Messi, su contrato era el más alto en la historia del fútbol pues llegaba a los 555, 237,619 millones de euros. Esto suponía un problema para Laporta ya que enfrentaría un fair play financiero si el argentino se quedaba en la capital de Cataluña. 

Messi ganó cuatro Champions, 10 ligas, siete Copas del Rey, jugó 17 temporadas, seis balones de oro, ocho veces fue el pichichi de la Liga y en seis ocasiones fue el máximo anotador de la Copa de Europa.

Entre más lograba su sueldo aumentaba, lo que volvió difícil su estadía en el Barça. El Club Barcelona tenía problemas financieros debido a la baja de ingresos derivada de la pandemia por Covid19. 

Leo decidió que reduciría su salario a la mitad de lo que ganaba con tal de quedarse en el club hasta el 2026.

Pero la renovación de Messi hacía que el Barça elevara su presupuesto de pago a jugadores, lo que significaba que sobrepasaba el tope de gastos que permite la Liga española.

En la temporada 20-21 el tope fue de 600 millones de dólares pero para la temporada 21-22 el tope es de 410 millones de dólares, ya que se determina de acuerdo a los ingresos generados.

Para contratar a Messi el club debería de despedir a varios jugadores y así poder cubrir el sueldo del argentino.

Por ello, el jueves 5 de agosto el club realizó un comunicado en el que explicaba que existieron "obstáculos económicos y estructurales" anunciando así la salida de Leo.

Aunque un día antes la Liga española y la firma de inversión capital CVC Capital Partners, pactaron que 3 millones de dólares se repartirían entre los clubes de los cuales solo el 15% se podría usar para financiar salarios, el Barcelona no aceptó este "pacto" debido a que consideraban "inapropiado la firma de un contrato de medio siglo, ante las incertidumbres que siempre rodean el mundo del fútbol".

La gente en Barcelona se volcó en apoyo al argentino, pedían al club que hiciera todo lo posible para que se quedará, sin embargo, no fue suficiente el cariño de la gente para hacer su estadía posible.

Tres días de incertidumbre tuvo el mundo, no estaba claro de si la decisión del Barcelona de dejar ir a Messi podría cambiar, sin embargo, para el pesar de muchos, el 8 de agosto Leo dio una emotiva conferencia de prensa en donde anunciaba su salida.

Pronto la cuestión era ¿a qué equipo llegaría Messi?

El Paris Saint Germain publicó un video de sus vestidores.

Su esposa Antonella compartió una fotografía de ellos viajando a París lo que confirmó las sospechas.

Leo Messi ya es jugador del Paris Saint Germain.

Aunque el comunicado oficial se haría el miércoles, el Paris adelanto el anuncio compartiendo este video en su cuenta de Twitter.

Messi firmó contrato con el PSG en el Hotel Royald Monceau, en el que se alojará con su familia hasta que encuentren una casa. El contrato es por dos temporadas que lo dejan en París hasta 2024, pero podría alargarse una temporada más. Cobrará 35 millones de euros por torneo. El argentino ya se encuentra realizándose los exámenes médicos necesarios. Además, para alegría de los fanáticos del jugador se le permitirá jugar con el número dorsal con el que debutó hace 20 años en Barcelona. A pesar, de que los números 1, 15 y 30, en Francia solo son ocupados por los porteros, está vez el Paris hará una excepción y Messi portará el numero 30.

La llegada de Messi a París ha generado buena aceptación entre los seguidores de fútbol.

Florentino Pérez metió su mano en la salida de Messi

Jaume Llopis miembro de la 'Comisión del Espai Barça', renunció a su cargo después de la salida de Leo. Acusó a Laporta de no haber hecho lo necesario para que el argentino permaneciera en el club.

Incluso la relación de Laporta con el presidente del 'Real Madrid', Florentino Pérez, ayudó a convencer al presidente del Barcelona de no apostarlo todo por la estrella argentina.