AstraZeneca, la compañía farmacéutica británico-sueca, ha anunciado su decisión de dejar de comercializar su vacuna contra el COVID-19, Vaxzevria, en la Unión Europea a partir del martes 7 de mayo. Esta medida se toma a petición propia, según lo comunicado por la empresa en un comunicado oficial.
La Comisión Europea notificó el 27 de marzo que, siguiendo la solicitud de AstraZeneca, retiraría la autorización de comercialización del medicamento a partir del mencionado martes. La compañía ha fundamentado esta retirada en la falta de demanda y en el excedente de vacunas disponibles actualmente en el mercado.
En el comunicado, AstraZeneca explica: "Dado que se han desarrollado múltiples vacunas actualizadas para variantes de COVID-19, ahora hay un excedente de vacunas disponibles. Esto ha provocado una disminución en la demanda de Vaxzevria, que ya no se fabrica ni suministra".
La empresa farmacéutica ha destacado el papel fundamental que su vacuna ha desempeñado en la lucha contra la pandemia. Según indican, "según estimaciones independientes, solo en el primer año de uso se salvaron más de 6.5 millones de vidas y se suministraron más de 3 mil millones de dosis en todo el mundo".
Vaxzevria, la vacuna desarrollada por AstraZeneca contra el COVID-19, fue la tercera en llegar a España el 6 de febrero de 2021, una vez que obtuvo la autorización de la Comisión Europea el 29 de enero de ese mismo año tras la revisión realizada por la Agencia Europea de Medicamentos. Esta vacuna fue la tercera en recibir el visto bueno de los reguladores europeos, después de las desarrolladas por Pfizer/BioTech y Moderna.
La decisión de AstraZeneca de retirar su vacuna de la comercialización en la Unión Europea marca un hito en la historia de la pandemia y sus esfuerzos de vacunación. Esta medida refleja el dinamismo del panorama de vacunas, con la aparición de múltiples opciones y la adaptación continua a las nuevas variantes del virus.
Si bien la retirada de Vaxzevria puede ser vista como un paso significativo, la disponibilidad de otras vacunas sigue siendo crucial para mantener el impulso en la campaña de vacunación contra el COVID-19. La eficacia y seguridad de las diferentes vacunas disponibles siguen siendo objeto de estudio y seguimiento por parte de las autoridades sanitarias y los científicos.
En última instancia, la retirada de Vaxzevria subraya la importancia de la colaboración global en la investigación, desarrollo y distribución de vacunas para combatir eficazmente la pandemia y proteger la salud pública en todo el mundo.