En Chiapas, durante años, las historias de perros y gatos golpeados, abandonados o envenenados se repetían sin consecuencias. No existía ley que los protegiera. No había cárcel para quienes cometían actos de crueldad, ni multas para quienes decidían dejar morir de hambre a un perro amarrado en un patio.
Ahora el Congreso de Chiapas aprobó una reforma al Código Penal que por primera vez tipifica como delito el maltrato y la crueldad hacia los animales de compañía, principalmente perros y gatos. Quien golpee, abandone o asesine a un animal ahora enfrentará penas de prisión de hasta cinco años, además de multas económicas que podrían superar los 67 mil pesos.
La sala del Congreso se llenó de activistas que, con carteles en mano, contenían lágrimas mientras escuchaban el dictamen. Era un día que esperaron por años. “No son cosas, son seres vivos”, decía un cartel con la imagen de un perro con collar rojo, parado detrás de un cerco oxidado.
Claudia Cisneros, activista en Tuxtla Gutiérrez, recordó frente a legisladores el caso de 35 perros y gatos que fueron envenenados en la colonia Shanká, sin que hubiera castigo para nadie. “Pusieron veneno en la calle. Los vecinos lloraban mientras levantaban cuerpos de perritos que se retorcían en el pavimento. Nadie fue castigado. Eso hoy cambia”, dijo con voz entrecortada.
La reforma aprobada incorpora un nuevo título en el Código Penal del estado. Define como delito el maltrato o la crueldad contra animales de compañía, entendidos como actos de violencia, negligencia o abandono que causen sufrimiento o pongan en riesgo su vida.
Las sanciones son claras y graduadas:
▫️ Maltrato sin daño permanente: 6 a 12 meses de cárcel y multa de 50 a 100 UMAs.
▫️ Maltrato que cause daño permanente: 12 a 24 meses de cárcel y multa de 200 a 400 UMAs.
▫️ Si el maltrato termina en muerte: 2 a 5 años de cárcel y multa de 300 a 600 UMAs, con inhabilitación de hasta 3 años si el agresor trabaja en el cuidado de animales.
▫️ Abandono con riesgo para la vida: 18 meses a 3 años de cárcel y multa de 100 a 200 UMAs.
▫️ Organización de peleas de perros: 2 a 4 años de cárcel, multa de 500 a 1000 UMAs, decomiso de bienes y clausura de establecimientos.
Esta ley también permite el decomiso de los lugares donde se realicen peleas y la cancelación de permisos a quienes lucren con la violencia.
La iniciativa no surgió en un escritorio, sino de testimonios, de fotografías de animales golpeados, de voluntarios que rescatan perros callejeros y de organizaciones como Igualdad Animal, que aportó estudios para sustentar la propuesta.
Durante la discusión, las diputadas Andrea Negrón, Silvia Argüello, Elvira Aguiar, Ana Karen Ruiz, Valeria Santiago, Marcela Castillo y el diputado Juan Salvador Camacho se turnaron en la tribuna para recordar que los animales forman parte de los hogares chiapanecos y que su protección es un reflejo del nivel ético y moral de una sociedad.
“Es un paso que le debíamos a quienes no tienen voz, pero sienten, sufren y esperan de nosotros el respeto que merecen”, dijo en tribuna la diputada Elvira Aguiar.
Esta reforma, insistieron legisladores y activistas, no busca solo llenar cárceles. Busca educar. Busca que los niños que hoy crecen en Chiapas vean que lastimar a un animal tiene consecuencias, que abandonar un perro no es un acto menor y que golpear a un gato no es un juego.
“Es un antes y un después. Ahora, cada perrito en la calle tiene detrás una ley que lo protege, y cada acto de violencia puede ser castigado”, expresó Igualdad Animal al finalizar la sesión.
En un estado donde la violencia y el abandono hacia los animales eran cotidianos, esta reforma representa un rayo de esperanza. Una oportunidad para construir una cultura de respeto hacia seres que no pueden defenderse, pero que dependen de la empatía y la justicia de quienes caminan junto a ellos.
A partir de ahora, en Chiapas ya no será lo mismo maltratar a un animal. Hay una ley que cuida su vida. Y hay miles de personas que vigilarán que esa ley no se quede en letra muerta.
