Tras la implementación del proyecto de Inteligencia Penitenciaria, mismo que consiste en trasladar a reclusos de penales del estado para evitar la sobrepoblación y confrontaciones entre grupos rivales, se prevé que para el año 2021 el penal de Topo Chico, en Nuevo León deje de existir.
Luego de los problemas que se presentaron este miércoles por la movilización de reos de cuatro penales del estado hacia otros reclusorios del país, el secretario de Gobernación de Nuevo León, Manuel González dijo que la situación este jueves ya es más tranquila.
"La movilización del día de ayer fue la más grande en todo el país, esto tiene una explicación no se están trasladando nada más porque si, es por la estrategia de inteligencia que implementó el gobernador", dijo para ABC Noticias.
El funcionario dijo que para lograr la suspensión del penal se han construido 350 celdas en los Centros de Reinserción de Apodaca y Cadereyta, mismas que serán concluidas el próximo mes de junio mientras que para Cadereyta hasta el 2021.
"En cuanto se terminen las celdas se van a trasladar a los reos", añadió.
Destacó que los 501 internos trasladados al penal de Ramos Arizpe son de alta peligrosidad y que los custodios tienen protocolos para reaccionar ante cualquier riña o situación de peligro.
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Esta mañana personal del penal del Topo Chico inició el acceso de los familiares de los internos, más de 350 personas esperaban a las afueras del centro.
https://twitter.com/CiroGomezL/status/1111121325303590914