Mexicanos Contra la Corrupción e impunidad (MCCI) reveló este martes que Irma Eréndira Sandoval, la ahora exsecretaria de la Función Pública (SFP), compró pruebas de Covid-19 tres veces más caras a una empresa sin empleados y sin experiencia.

El presidente Andrés Manuel López Obrador dio a conocer ayer que destituía de su cargo a Eréndira Sandoval y en su lugar entraría Roberto Salcedo Aquino.

Un día después del anuncio, MCCI presentó un reportaje donde señala que la SFP, dependencia encargada de evitar la corrupción en el Gobierno de López Obrador, pagó 11 mil 625 pesos por cada kit con 25 pruebas para detectar Covid-19, pese a que el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) reporta que el producto se puede conseguir en el mercado a tres mil 100 pesos.

En total la dependencia pagó por 90 kits un millón 046 mil 250 pesos a la empresa Grupo Val Integra SA de CV.

“Las diferencias en el precio se debieron a que la empresa contratada ofreció el servicio de toma de muestras en las instalaciones de la SFP, justificó Víctor Omar Pérez, socio y administrador de Grupo Val Integra, aunque él mismo reconoció que carece de empleados. El mismo argumento lo dio un vocero de la dependencia federal”, menciona MCCI en la investigación.

Asimismo, la organización menciona que el contrato para adquirir las pruebas lo firmó el 24 de diciembre de 2020 Álvaro García Galindo, director de seguridad de la SFP.

La empresa a la que se le compraron dichas pruebas, carece de empleados, además el domicilio que registró para el contrato corresponde a un departamento que se ubica en la parte superior de una tienda de abarrotes, donde vive uno de los socios de Grupo Val Integra.

MCCI comprobó que la empresa no tiene antecedentes de contratos anteriores con el Gobierno Federal, sino que fue incorporada al padrón de proveedores de la SFP hasta octubre de 2020.

Hasta ayer, la titular de la SFP era Irma Eréndira Sandoval, pero el presidente anunció la remoción de su cargo sin dar explicaciones.