La venta para la final de vuelta entre Atlas y León inició este lunes, pero esto ocasionó varios incidentes violentos afuera del Estadio Jalisco, donde hubo reclamos, golpes y hasta balazos. 

El problema habría comenzado cuando los aficionados mostraron su molestia porque los revendedores tuvieron acceso a las taquillas sin haberse formado y después ofrecían los boletos a precios mayores. 

Las personas que llevaban horas formadas denunciaron que los revendedores daban los boletos, que en taquilla costaban 975 pesos, a seis mil pesos cada uno. 

Ante los reclamos, uno de los revendedores se acercó a ellos para presumir que podía conseguir los boletos sin necesidad de hacer fila. El público rojinegro intentó ahuyentarlo y el sujeto escapó. 

El incidente no quedó ahí, ya que después llegó un grupo de alrededor de 20 mujeres y hombres, quienes comenzaron a golpear a los aficionados. 

Uno de los presuntos revendedores sacó un arma de fuego durante la trifulca y disparó al suelo, sin importar que había niños en el lugar. 

El saldo de la pelea fueron tres hombres lesionados, presentaron golpes en el rostro y otras partes del cuerpo. 

Pese a los videos que circulan en redes sociales donde se ve un hombre armado, las autoridades negaron que una pistola fuera detonada y aseguraron que se trataron de petardos.