Mujeres son las que ahora se dedican a vender droga para los cárteles o el crimen organizado, ya que despiertan menos sospechas.
Entre las primeras tiradoras que se dio a conocer se encuentra Leticia Rodríguez Lara, mejor conocida como Doña Lety o La 40, fue identificada como líder del cártel de Cancún. Opera en diferentes municipios de la Rivera Maya, fue detenida en octubre de 2017.
Para los narcos la palabra “tirador” es utilizada para nombrar a los narcomenudistas y no llamarlos por su nombre.
Las detenciones que se han realizado últimamente dejan ver que las mujeres han aumentado en el mundo de los sicarios y también participan activamente en el narcomenudeo.
De acuerdo a un estudio de ONG “Equis, Justicia para las Mujeres”, la cifra de mujeres detenidas por tráfico de droga se ha duplicado entre 23014 y 2016, debido a que se señala que las detenidas por posesión y venta pasó de 940 a mil 911 y de 2016 a mediados de 2019 aumentó a tres mil 18.
La organización señala que en 2006 cuando inició la guerra contra el narcotráfico las mujeres fueron las más afectadas, debido a que muchas prisioneras son víctimas.
El ambiente en el que crecen muchas de esas mujeres es normal la venta y producción de droga, como en poblaciones donde la gente trabaja comúnmente en empaquetar marihuana.
En este año han detenido tiradoras en distintos estados de la república, como en Baja California, Sonora, Guanajuato, Jalisco, Sinaloa y Aguascalientes.
Hay mujeres de diversas edades implicadas en el negocio, van desde menores de edad hasta los 46 años regularmente. La droga que más venden es el cristal.
En este negocio son bastante astutas, pese a que regularmente venden dicha droga en papel, en el 2019 detuvieron a dos mujeres por una denuncia anónima, cuando las autoridades llegaron al lugar no encontraron nada, sin embargo, traían en su posesión mas de 100 globos, cuando los policías revisaron los globos encontraron droga dentro de los globos.
Especialistas aseguran que el aumento de mujeres en el negocio de las drogas se debe a hogares fracturados, llenos de violencia, falta de oportunidades económicas e incluso influye el empoderamiento de la mujer.
Asimismo, se señala que cada vez hay más mujeres que consumen algún tipo de estupefacientes y el negocio del narcomenudeo puede ser la vía para satisfacer sus adicciones.
O está el caso de Beatriz Maldonado que desde el 2009 se encuentra en el Reclusorio de Santa Martha Acatitla, se le imputó el delito de narcomenudeo. Su esposo era adicto y debía mucho dinero por lo que recibían constantes amenazas.
Maldonado fue con el narcomenudista que le proveía la droga a su esposo y dijo que ella vendería la droga para pagar la deuda, en tres meses saldó el dinero, sin embargo, también bastó ese tiempo para ser detenida.
Otro caso más que se encuentra en la página “Equis: Justicia para las Mujeres” es el de “Gaby”, quien tiene una sentencia de 10 años y es madre soltera indígena proveniente de Oaxaca, quien se involucró en el negocio de la marihuana para mantener a su familia y tratar a su hijo con parálisis cerebral.
Limpiaba, empaquetaba y transportaba marihuana, señala que en el negocio hay desde niños hasta ancianos, tanto hombres como mujeres. Y menciona que nunca quiso implicarse en el negocio, pero la necesidad y la pobreza la llevó ahí, ya que donde vive no encuentran otros medios para sobrevivir.