Los cárteles Sinaloa, Jalisco Nueva Generación (CJNG), Los Zetas y Beltrán Leyva son considerados como los principales consumidores y traficantes de cocaína colombiana, señaló Rafael Guarín, consejero presidencial para la Seguridad Nacional de Colombia.
Los mexicanos son los principales compradores de la oferta de coca que se produce en Colombia. Los (cárteles) mexicanos se encargan fundamentalmente de la compra, del tráfico y la venta en los Estados Unidos", dijo Guarín.
Dicho país sudamericano es considerado como uno de los más grandes productores de cocaína a nivel mundial, dicha actividad genera recursos multimillonarios, al igual que alimenta violentos conflictos internos que ha dejado a 260 mil muertos, aproximadamente, así como a millones de desplazados.
En 2019, Colombia cerró con 154 mil hectáreas de hoja de coca, con capacidad de producir mil 137 toneladas métricas de la droga, anualmente, esto de acuerdo con la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito.
Asimismo, Guarín ha asegurado que el cártel de Sinaloa es de los más activos en Colombia, señalando que tiene vínculos con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y con el clan del Golfo.
Por su parte, Los Zetas están conectados con el grupo criminal ‘Los Pelusos’, encargados de controlar la zona fronteriza con Venezuela. El CJNG compra la droga con el grupo denominado ‘La Local’ en Buenaventura, puerto colombiano principal sobre el Pacífico. El cártel Beltrán Leyva se desarrolla con el grupo ‘La Constru’, el cual también se relaciona con el cártel de Sinaloa, de acuerdo con el funcionario.
Los emisarios de los cárteles mexicanos se encargan de verificar el peso y la pureza de la droga colombiana, así como la coordinación de envíos al exterior y en ocasiones la siembra de la hoja de coca.
